1/27/2021 0 Comments No perdamos la cabezaAnte todo no perdamos la cabeza.
No me gustaría ver torsos andando por ahí sin rumbo fijo. Chocándose por la calle, sin mirar por dónde van, sin saludar a quienes se cruzan, apelotonados como sardinas en escabeche (aunque no distamos mucho, al menos en la ciudad, de este escenario tan dantesco). Esas cabezas pensantes, llenas de humor, sarcasmo y sabiduría. Esos melones pequeños, ovalados, alargados o bien grandes como el mío. Si alguien ha de perderla, que sea quien odia, esos no merecen tan preciado tesoro. Así, sabríamos distinguir por la calle a los haters y a los lovers (no sé si existe ese termino, pero creo que este texto científico, con ninguna base empírica, lo permite). Ante todo no perdamos la locura, pues un mundo lleno de cuerdos se volvería un tanto aburrido y, demostrado queda estos días, que el aburrimiento acaba volviéndonos locos, por ende, esta hipótesis que he planteado se torna inviable y paradójicamente absurda, y no se me caen los anillos (no estoy casado) por retractarme y pedir mis más falsas disculpas. No perdamos por Dios lo pido, la inteligencia y el sentido del humor, y hagamos nuestro más esfuerzo humano y sobre humano de no volvernos idiotas. Si algún idiota se siente identificado y le gustaría cambiar de bando, aunque fuera para conservar la cabeza, este club no tiene dueño y acepta honradamente a quien quiera formar parte de él. Quien en cambio, sea idiota y no lo sepa, entre los cuales podría encontrarme, le recuerdo que el desconocimiento de la norma no exime de su cumplimiento. No perdamos pues la cabeza y utilicemos los ojos para escucharnos, las orejas para mirarnos, la nariz para besarnos y la boca para decirnos que nos queremos.
0 Comments
Leave a Reply. |
TextosEn este espacio iré subiendo diferentes textos, reflexiones, inquietudes, relatos que llevo dentro y quiero compartir. Pasen y lean. Archives
June 2023
Categories |